El 16 de julio, fueron halladas sin vida dos jóvenes salteñas, hace muy poco se cumplió una década de este hallazgo. La familia de Yanina aceptó la hipótesis de las autoridades y piden que las dejen descansar en paz y confía en que fue una decisión de la adolescente, la familia de Luján, por lo contrario, sostuvo que a las jóvenes se las había asesinado.
Luján no pasaba por ninguna crisis, según los familiares, fue encontrada con sangre en sus pantalones y de la misma soga para dos jóvenes no los convenció. Fueron encontradas en Cerrillos atadas de la misma soga.
El padre de Luján Peñalva, Gustavo Peñalva, se comunicó con Agenda/ Salta y explicó que se encuentra con frustración de haber trabajado tanto. “Hoy tenemos la conciencia tranquila que se hizo lo posible, de poner en evidencia el mal proceder de la justicia salteña y sabemos que es una causa de la que negociaron todos”.
Gustavo indicó que desde el principio fue una persona que a pesar del dolor trató de estar con la verdad y de lo que dice, hacerse cargo y sobre todo no confundir a la gente. “Siempre quise saber la verdad de lo que pasó, pero no, la matemática y la física, dijo que no. Hubo una mancha de sangre en el buzo de Yanina”
La familia de Yanina no los acompañó, probablemente por el dolor, o tal vez “saben algo que nosotros no sabemos, eso nos tiró un poco para atrás, saber que solo éramos la única familia que luchábamos. No somos una familia adinerada, lo hicimos a pulmón y por amor a Luján y Yanina”, dijo.
Para Peñalva el cree que esto pasó por una cuestión de jerarquía dentro de la sociedad salteña. “Tomó fuerza el mensaje que se dio a la sociedad. Es una frustración para nosotros, pero hicimos lo que pudimos, luchamos por amor, pusimos en evidencia que la justicia salteña es bochornosa, no le gusta hacer su trabajo y es obsecuente”.