En medio de la crisis económica que afecta al país, el ministro de Salud de Salta, Federico Mangione, expresó su preocupación por el creciente número de personas con obra social que recurren a los hospitales públicos para recibir atención médica.
El ministro señaló que actualmente se registró un aumento del 45% en las consultas de pacientes con obra social en los hospitales públicos.
Mangione subrayó que este fenómeno está generando serios problemas en el sistema de salud provincial. «Si la obra social no paga lo que tiene que pagar, nosotros estamos utilizando los insumos y los recursos destinados a la gente que no tiene obra social y que es carente. Ahí es donde se nos está complicando», afirmó.
La Provincia reclama una deuda acumulada de 3.500 millones de pesos por parte de las obras sociales, una situación que, según el ministro, obligó al Gobierno provincial a elaborar un proyecto de ley -que próximamente será tratado- para cobrar a las obras sociales de manera adecuada. «Estamos haciendo un proyecto de ley para que la Provincia comience a cobrar como corresponde a la obra social», explicó.
El titular de Salud Pública también criticó a las obras sociales por no cumplir con sus obligaciones financieras, lo que deriva en una situación insostenible para los hospitales públicos. «Las obras sociales directamente están mirando para otro lado, no están pagando», denunció, agregando que la deuda acumulada y los bajos pagos que reciben por parte de las obras sociales están afectando gravemente al sistema de salud.
En cuanto a las tarifas, el ministro señaló una diferencia abismal entre lo que pagan las obras sociales a los hospitales públicos y lo que abonan a las clínicas privadas. «Actualmente, más o menos, un día en piso nos pagaban a nosotros 40 mil pesos. Pero en la clínica, a la parte privada, pagan 200 mil pesos. Y a esto le agreguemos que pagan después de 6 meses», detalló.
Respecto a la preocupación de que la iniciativa que se está elaborando pueda derivar en el cobro de un «plus» o extra a los pacientes en general en los hospitales públicos, el ministro aclaró que esta medida no afectará a los usuarios de los servicios de salud. «Directamente es con las obras sociales, no tiene nada que ver con el paciente», aseguró.
El funcionario enfatizó la necesidad de proteger a la ciudadanía y advirtió que el problema con las obras sociales está perjudicando tanto al sistema público como al privado. «Tengo que proteger a la ciudadanía en general. Pero me tienen que entender, son más de un millón y medio los habitantes (de Salta)», concluyó.
Sobre el cobro a los ciudadanos extranjeros no residentes en Salta, Federico Mangione, comentó que bajaron las atenciones. Según detalló, en algunos hospitales, como por ejemplo Orán, la reducción fue del 90%; en Salvador Mazza, del 95%; en Tartagal, el 47,5% y en Agua Blanca un 50%. Aunque también mencionó que existe un problema de carga de datos debido al nuevo sistema digital que recién están aprendiendo a utilizar los profesionales.
«Cuando nosotros nos ponemos a calcular, teníamos un ahorro en un solo hospital de 60 millones, cuando el presupuesto mensual del hospital de Santa Victoria Este es de 78 millones, o sea, se insumía casi todo con la atención a extranjeros», ejemplificó para que la gente pueda tomar dimensión de lo que representa la decisión más allá de que hay quienes lo minimizan diciendo que es «ínfimo el porcentaje» que logra ahorrar. «A mí no me importa que sea ínfimo, donde yo pueda ahorrar, yo tengo que conseguirlo», señaló.
Tras una reunión en Buenos Aires, el ministro de Salud comentó que se logró conseguir el compromiso de los directivos de Incluir Salud, que contiene a personas con distintas enfermedades y/o discapacidades, para que comiencen a mandar cerca de 2.500 millones que adeudan a la Provincia por medicamentos de alto costo, prótesis y otras cosas. «Se comprometieron a que en 15 días estamos regularizando desde lo más urgente a lo menos urgente», afirmó el médico.